La noche pintaba muy bien, despues de la victoria en la final de la Copa del Rey, y el empate cosechado en liga con un hombre menos, afrontabamos la semifinal de la Champions League con muchas ganas, hasta que un señor, de profesión arbitro, llamado Stark, se encargo de robarnos la eliminatoria, por una expulsión injusta de Pepe, la sección se marcho a casa indignada por la actuación arbitral, ante un evento tan importante en Europa, como son unas semifinales de Champions.